Todavía hay quien cree que el Black Sinfónico es flojo debido a que hay bastantes bandas que tienen un sonido casi Gothic, pero olvidan que hay otros grupos que suenan potentes y abrasivos. La escena alemana no se caracteriza por lo que veo por ese segundo tipo de grupos, pero estos Obsidian Gate sí que encajan con esa descripción.
El estilo de estos germanos suele ser comparado con Limbonic Art, algo más o menos coherente si hablamos de su debut (incluso tiene portada astral con su inevitable nebulosa), pero este segundo álbum sigue unos parámetros más diabólicos y devastadores como el mismo título indica.
Las guitarras constituyen un sólido muro que se ve realzado por los majestuosos teclados de manera que somos espectadores de un soberbio y brillante caos. Caótico pero organizado.
Es inevitable que hable de los bombásticos teclados, que por norma general tienen un sonido magnificente e incluso marcial, ya que hay momentos en que la música parece una infernal marcha militar (incluso hay sonidos semejantes a trompetas). No se puede decir que se parezcan del todo por ello a los teclados de Limbonic Art ni a los de Dimmu Borgir (siempre habrá quien compare con ellos a toda banda sinfónica). Son omnipresentes, amoldándose tanto a las partes rápidas y furiosas como a las más deceleradas y solemnes. A veces toman la forma de pianos, solapándose bien con los momentos más cafres incluso.
Así pues su sonido se mueve entre lo esotérico y lo fastuosamente marcial, está bien escogida esa portada con la barbarie guerrera y anticristiana del espectáculo romano. Como curiosidad, esta portada está tomada del cuadro "Police Verso" de Jean-Leon Gerome, aunque con la imagen invertida como en un espejo y con los colores cambiados con este efecto monocromático.
La voz es raspada y no sobresale por encima de la música como es de agradecer, siendo en ocasiones escogidas complementada por coros masculinos que conceden un aire más regio si cabe.
Una buena oportunidad de descubrir algo interesante si te gustan los grupos sinfónicos agresivos como Obtained Enslavement y Anorexia Nervosa. Y no olvidéis su debut de 1999 "The Nighspectral Voyage" en caso de querer escuchar sinfonías cósmicas al estilo de Limbonic Art.
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