domingo, 29 de marzo de 2009

CLAIR OBSCUR - Sombre Revelations


Esta "banda" de un único miembro desapareció tras dos demos y este álbum de 1997, un disco que ya engrosa mi colección de Black Sinfónico francés porque me ha gustado la atmósfera de sus tres canciones. Sí, tiene sólo tres temas, pero lo bastante largos para que el disco dure una media hora, durando doce minutos la más larga de las canciones y siete la más corta.
En el libreto el músico que andaba tras este proyecto agradece la inspiración a bandas como In the woods, Opeth, Theatre of Tragedy, Emperor o Dimmu Borgir, siendo este último grupo el que veo más aproximado a su sonido; pero me refiero a sus inicios con "For all tid" y "Stormblast", ese Black Metal imbuido de melancolía y más sobrio que sus pomposas obras posteriores.

La portada puede ser otra excelente presentación de lo que encontramos en el CD, con la solitaria tristeza de ese paraje teñido por el ocaso. Así pues no es de extrañar que su primer tema "Petal" comience con un relajante piano apoyado por teclados de fondo, para después dar paso a las guitarras semicrudas con voces rasgadas, voces con un un tono desgarrado y podrido que no llega a resultar estridente. También hay alguna que otra voz clara melancólica, pero la atmósfera apática viene de mano de los teclados ambientales a la manera de los primeros discos de los grupos sinfónicos escandinavos, con una agradable sorpresa en forma de pasaje de piano, y unos órganos en segundo plano en el tramo final que se caracteriza por el curioso sentido de la melodía de sus guitarras.
"Eros" es su segundo tema, que también empieza con unas notas de piano, pero las voces claras tienen más espacio y hay un pasaje acústico que destaca más que las pocas acústicas del primer tema. Estos dos temas son más o menos similares, y tienen en común las percusiones tranquilas y los medios tiempos, pero su último y más corto tema, "Desecrated Soul", contrasta por tener más agresividad tras su breve y triste intro de órgano que da paso a blast-beats con furiosas voces rasgadas y el mismo órgano de fondo, aunque la canción se acaba haciendo más pausada como las otras dos.

Para acabar quiero destacar que la presentación está bastante bien para ser un disco de media hora de un proyecto de un solo miembro del que apenas se sabe nada. El libreto es escaso, pero contiene un bonito paisaje costero, en la contraportada disfrutamos de una puesta de sol tras las coníferas y al levantar el CD observamos una fotografía de un cementerio. Pequeños detalles que hacen que tener originales los discos sea más satisfactorio, pero más lo es disfrutar de su música.



miércoles, 25 de marzo de 2009

OSCULUM INFAME - Dor-Nu-Fauglith


Cuando estuve escuchando el disco de Vorphalack que reseñé hace poco no podía evitar acordarme de este álbum de los franceses Osculum Infame. Hace muchos años que tengo este disco de 1997, pero lo tuve aparcado durante mucho tiempo y retomarlo me ha supuesto una sepulcral satisfacción.

Lo que encontramos en este disco (cuyo título significa "tierra bajo la ceniza asfixiante", por cierto) no es tan crudo como para alcanzar los altos niveles de pestilencia de los clásicos grupos underground franceses, pero es ciertamente más rudo y áspero que lo que normalmente encontramos en un disco catalogado como sinfónico o melódico, y es precisamente su característica fundamental esa combinación de Black Metal mínimamente tradicional con melodías de teclado peculiarmente bellas.
Digo mínimante tradicional porque tampoco se pasan de crudos y "unholy", con unas baterías que no sólo consisten en blast-beats y se amoldan a los distintos momentos de las canciones, con inclusión de ritmos marciales y otros más pausados para los momentos más atmosféricos, y además el bajo es audible.

Los teclados, que no están presentes en todo momento, son muy curiosos porque en contraste con la fúnebre base blacker tienen un sonido que llega incluso a transmitir belleza, a la manera de un arrebato de nostalgia invernal. Son de agradecer detalles como el solo de órgano de "Vampiric warmaster (part II)", título que por cierto me viene de perlas para destacar las ocasiones en que las ambientaciones suenan de esa forma vampírica que, lejos de sonar a góticas al estilo de bandas más elaboradas y fastuosas, resultan más bien mortuorias. Pero es sólo una de las inspiraciones líricas del grupo, pues mirando el resto de títulos comprobamos que también les va el rollo medieval e incluso el mundo de Tolkien. El teclista, por cierto, acabó formando parte de Dark Sanctuary, para que os hagáis una idea de que debe tener talento el hombre.

El único aspecto que me queda por comentar es la voz, que no tiene mucho que destacar pues es todo el rato igual y no incluye más variantes que una simple voz rasgada algo tosca. Alguna que otra voz narrada melancólica no habría quedado mal, pero dejémoslo así.
De sus nueve temas tenemos siete canciones reales, cantidad suficientemente entretenida, y sin más os dejo con su putrefacción adornada de melancolía.




BAL - SAGOTH - A Black Moon Broods Over Lemuria


No suelo repetir grupos y pongo unicamente un solo disco por banda, pero esta es una de las pocas excepciones (como con Desire y Bloodthorn) en las que me veo impulsado a comentar otro de sus discos, en vista de que además resulta que este disco debut es bastante diferente a lo que conocemos de Bal-Sagoth.
Es el clásico ejemplo de un debut más o menos estandarizado que da pie a posteriores discos con un estilo más personal y reconocible, aunque en este caso concreto hay mucha personalidad dentro de sus esquemas como ahora veremos.

Estos ingleses se han ganado su buena base de seguidores gracias a la original fórmula que desarrollaron en su segundo álbum, con un Black Sinfónico cuya musicalidad gira en torno a los conceptos épicos, mitológicos e incluso ocultistas de su vocalista Byron, naciendo así un sonido tremendamente marcado por las atmósferas barbáricas al estilo Conan con sus simulaciones de trompetas y voces narradas.
Suelo comparar un poco su trayectoria con la de Cradle of Filth, ya que a pesar de no parecerse en casi nada tienen en común sendos segundos discos en los que asistimos al nacimiento de sus reconocibles características, mientras que sus debuts eran lo más crudo, oscuro y sucio que jamás han grabado. El "The principle of evil made flesh" de Cradle of Filth era ya bastante sinfónico pese a ser su material más rudo y cercano al Black Metal, y lo mismo sucede con este debut de Bal-Sagoth, que consiste en un Black Sinfónico más pesado que su material posterior pero sin dejar de ser muy atmosférico y casi barroco.

Las influencias del Death Metal son bastante palpables y desparecieron en posteriores trabajos, por lo que este disco llama la atención la primera vez que lo escuchas al encontrarte con partes pesadas y machaconas, e incluso hay voces guturales que jamás hemos vuelto a escuchar de Byron. La voz rasgada es la misma que ya conocemos de sus otros discos, esa voz que no llega a ser gritona ni demasiado agresiva, pero la narrada aparece mucho menos y sí que aparece bastante la citada gutural, que me gusta realmente como queda y me parece una lástima que no aparezca ni una en sus otros álbumes.
No podía ser menos el acompañamiento de teclados, que también suenan diferentes a los espectaculares ambientes casi de banda sonora de sus demás trabajos, siendo más acordes con el sonido oscuro y sucio de este debut, pero igualmente épicos. El toque de misterio está servido, con sus arcanas atmósferas que nos introducen en el mundo lírico de Byron de historias forjadas por el hierro, la sangre y el fuego. Unos teclados no muy enrevesados pero muy efectivos, con ese toque especial que podemos esperar de un disco de 1995, año en que pocas cosas sinfónicas había, pero especiales como por ejemplo Parnassus, Gehenna, Summoning (otros que dieron a conocer una especial faceta épica), Mastiphal o Hecate Enthroned.

Por algo es mi segundo disco favorito de la banda, y es que me resulta casi imposible resistirme a este álbum que parece de una banda diferente. No te lo pierdas si te gustan las atmósferas ancestrales y oscuramente mágicas.


domingo, 22 de marzo de 2009

NEBULAR MOON - ...Of Dreams And Magic


La segunda entrada de hoy también está dedicada a vuestras sugerencias, ya que retomar esta banda alemana me ha resultado más que ameno y agradable.

En su "Mourning" de 1997, escuché un Black atmosférico con tintes Doom que no estaba nada mal, pero para este su siguiente trabajo de 1999 depuraron su estilo y les salió un disco más elaborado y con mejores teclados, siendo considerado su mejor trabajo por la mayoría.
Lo que aquí disfrutamos es un Black Melódico con un buen balance entre teclados y guitarras, con ritmos relajados que aún recuerdan esa primera etapa con influencias doomsters. Las guitarras tienen su punto de distorsión, pero se caracterizan por un especial sentido de la melodía que no permite que los teclados sean los protagonistas, no es que sus guitarristas sean unos virtuosos pero he de reconocerles un muy buen trabajo.

Ya que menciono los teclados en relación a las guitarras, son muy constantes pero no llegan nunca a controlar el conjunto, siendo un elemento más que complementa los riffs melódicos, y en general tienen un sonido bastante estándar aunque en ciertos momentos adoptan un tono más destacado y consiguen sonar de esa forma ensoñadora y mágica que uno espera al ver el título del álbum y su portada. Portada que, por cierto, está dibujada por Kris Verwimp como llevaba mucho tiempo sospechando hasta que pude ver su firma en ella; recordaré que es el artista belga que anda tras portadas de Sear Bliss, Manegarm, Absu, Avatar, Thyrfing, Marduk, Suidakra, Enthroned, Wolfchant, Frostmoon, Arkona y un largo etc...

Lo poco que me queda por comentar es la voz, que es algo ruda y alejada de los típicos berridos y chillidos de otros grupos, y en pocas ocasiones aparece ese tipo de voz susurrada que conocemos de mano de Cradle of Filth, Black Countess o Desire por ejemplo.
Hará pasar un rato entretenido a fans del estilo, sobre todo de material melódico alemán como el primer álbum de Cryptic Wintermoon, Sycronomica o Gorbalrog, e incluso cosas como el "The haunting" de Sear Bliss.




VORPHALACK - Lullabies Of A Vampire


Una vez más publico una de las recomendaciones que me hacéis, siendo en este caso el único disco completo de esta banda griega que ha tenido en sus filas a miembros de otros grupos griegos más conocidos como Naer Mataron y Astarte (su líder estuvo como guitarrista y teclista), aunque el sonido de Vorphalack no es precisamente muy griego que digamos.

Lo primero que me gustaría comentar, por lo curioso que resulta, es que la fecha de lanzamiento de este álbum es de 2001, aunque en realidad el material que contiene es de a partir de 1995 ni más ni menos.
Ya comenté arriba que no suenan a banda griega como sucede por ejemplo con Rotting Christ, Varathron o The Elysian Fields, más bien tienen un sonido ciertamente nórdico como el que encontramos en los primerizos Dimmu Borgir, los antiguos Dies Ater o incluso Grimoire.
Esto se traduce en un Black muy modestamente producido (o pobremente, depende del oyente) con buenas dosis de atmósfera, pero sin colocar los teclados al frente. Las guitarras son típicas de bandas de países más norteños como decía, con baterías no muy apabullantes, y unos teclados que no dominan el conjunto pero que resultan lo suficientemente variados y hacen fáciles de distinguir las canciones, pues aportan un toque especial de personalidad. Tampoco hay que olvidar las pinceladas acústicas, bien combinadas con los teclados atmoféricos, y es que no son pocos los momentos totalmente ambientales que no caen en el error de aburrir al oyente.

La voz es bastante macabra, una voz desgarrada que no llega a ser aguda ni gritona, bastante adecuada en mi opinión al concepto del álbum. En los temas de bonus es distinta al tratarse de material más antiguo, siendo una voz más tosca y mediocre.
Este trabajo conceptual trata la historia de un rey medieval que regresa tras una larga y triunfal guerra, a disfrutar de lo que caramente ha pagado, pero su hermano le asesina junto con la reina para arrebatarle el trono, y por semejante atrocidad éste es condenado a vagar por el reino convertido en vampiro.

Sólo me queda recomendarlo a seguidores de este tipo de material añejo y atmosférico que resulta casi imposible encontrar en bandas actuales. Aparta la herrumbre del cerrojo y adéntrate en galerías de polvoriento olvido.



domingo, 15 de marzo de 2009

RINGNEVOND - Nattverd


Aprovecho lo productivo que resultó dar a este disco una segunda oportunidad para escribir su reseña, porque he cambiado casi radicalmente de opinión al escuchar por segunda (y tercera) vez este único álbum de estos noruegos que descubrí casualmente en una lista de los 100 mejores grupos noruegos según su autor, con algún que otro descubrimiento como Malignant Eternal, Svartahrid, Manes (ya los conocía un poco, pero me confirmaron que debía escucharlos) y estos Ringnevond.

La portada y la estética parecen propias de un trabajo de Viking o Pagan, pero la realidad es que se trata principalmente de Black Sinfónico.
Las guitarras son lo bastante crudas como para hablar de Black Metal nórdico, sucias y distorsionadas aunque con momentos más melódicos, al igual que los predominantes blast-beats permiten que haya partes con ritmos más relajados.
Y todo esto está realmente sumido en una oscura bruma de teclados que además de su clásico papel ambiental también nos regalan con bastantes partes de piano. Esto último me recuerda que sus miembros estuvieron en la banda pagana Vanaheim, que no me acaba de convencer por las voces, pero les reconozco una buena labor de teclados y aquí en Ringnevond ese mismo teclista demuestra una vez más su talento, sólo hay que dejarse llevar por esos maravillosos pianos (y no puedo dejar de citar ese breve momento de órgano medieval que me encantó).

Esta conseguida atmósfera podrá transportarte a la bella serenidad de los parajes boscosos de Escandinavia, pero las leyendas y tradiciones locales nos recuerdan la inherente oscuridad de esos bosques y sus criaturas, tal y como nos muestra la ferocidad de la voz rasgada, que resulta especialmente rabiosa. Hay también unos cuantos alaridos que personalmente no me gustaron, y algún que otro coro de voz limpia que aporta el toque pagano (junto con las ocasionales melodías folklóricas del teclado) que debe transmitir ese contenido lírico en noruego.

Este álbum es del año 2000, dato curioso viendo la producción que tiene, pero he leído que en realidad fue escrito entre 1993 y 1994, algo que ya nos cuadra más viendo ese estilo sinfónico primerizo que gastan. Y ahora dejo con su frondosa oscuridad a quien no tenga reparos con estas producciones.


sábado, 14 de marzo de 2009

LETHARGY - The Dark Embrace Of Silence




Esta vez ya toca entrada doomster, porque hace poco pude tener completo al fin (en el nombre del link aparece el nombre de a quien se lo debo, gracias) este estupendo único CD de esta misteriosa banda griega que se desapareció dejando sólo este álbum y una demo. Y digo que son misteriosos porque no sé nada de ellos excepto lo ya comentado y una entrevista a su teclista. 

 Y el teclista afirma en dicha entrevista que My Dyng Bride y Paradise Lost son, junto a Therion, las principales influencias de su música, aunque yo también añadiría a Celestial Season para aproximar un poco más su sonido. Entonces lo suyo es un Doom muy melancólico y especialmente atmosférico debido a la generosa cantidad de elementos como el teclado y el violín, y con variedad vocal. 
Tras la típica intro tenemos cinco temas de buen Doom Metal y un tema ambiental final en los que no nos extraña comprobar que el teclista es quien anda tras las composiciones (también escribe las letras), con un trabajo de teclados sin duda delicioso para quienes disfrutamos de ello, y unos violines que son los responsables de mi comparación con Celestial Season, agregando el toque extra de romanticismo doomster.
 En momentos puntuales aparece una flauta que, al igual que las voces femeninas y el bajo, corre a cargo de un músico de sesión. Todo amante de los violines y pianos en el Doom debería escuchar este álbum, porque encontrará momentos sombríamente memorables. Las guitarras son melódicas en general, con momentos muy reminiscentes de los dioses ingleses My Dying Bride cuando suenan un poco más pesados, y los ritmos son los estandarizados del género, sin más. 

 Señalé la variedad vocal como uno de sus rasgos principales, y así es con la oscura voz gutural repartiéndose el protagonismo con las hastiadas voces limpias, con algún que otro momento de elegante voz femenina. 

 Dura cuarenta y cuatro minutos, duración razonable, pero a mí siempre se me hace algo corto, y tal vez te suceda lo mismo si también quedas prendado como yo de su frágil y doliente poesía.

jueves, 5 de marzo de 2009

MANES - Under Ein Blodraud Maane


Esta astralmente erótica portada pertenece a otro de mis mejores descubrimientos recientes. Resulta muy curioso, una vez más, que este CD haya pasado desapercibido para mí a pesar de ser Black Sinfónico noruego de 1999, características que lo hacen como diseñado especialmente para mí, tal vez sea porque la fama de la que gozan este álbum y sus tres demos en el underground me hicieron pensar en algo muy crudo y discreto.

Lo primero que pensé al empezar a escuchar este álbum debut es que su propuesta es más o menos similar a los primeros Limbonic Art y los dos discos intermedios de Obtained Enslavement, por tratarse de Black Sinfónico en el que la agresividad blacker no está nada reñida con el sinfonismo; aunque basta con escuchar un par de temas para comprobar que son menos barrocos y rebosantes de teclados que las dos bandas citadas, teniendo unos teclados más en segundo plano pero igualmente agradecidos.
Se basan más por lo tanto en crear auténticos muros de riffs, pues tienen un punto especial de distorsión en las poderosas guitarras y resulta bastante abrasivo. No puedo decir lo mismo de la batería, que creo que es programada y no suena todo lo contundente que podría, pero tampoco es un gran inconveniente para mí.

Por esta época el grupo resultaba ser un dúo, y además uno de ellos no llegó a formar nunca parte de su nuevo rumbo musical que practican hasta la actualidad (pasaron a experimentar con el Jazz y la electrónica). Ese miembro era el vocalista, poseedor de una voz tosca y tradicional al estilo Darkthrone, y también interpretaba algún que otro momento con una voz narrada como de otro mundo.
Y el otro músico era quien se encargaba de todos los instrumentos, incluidos los teclados; estos sintetizadores no tienen un papel tan prominente como en otros grupos que suelo reseñar, estando relegados por lo general a crear atmósferas de fondo que por cierto no tienen desperdicio, aunque tienen sus buenos momentos de lucimiento como cuando aparece un oscuro órgano en el primer tema, o esos misteriosos pasajes de piano que dejan caer con no poca frecuencia.

Dura alrededor de treinta y siete minutos y se hace bastante corto (al menos a mí), pero no sobra nada de minutaje en instrumentales porque no las hay, y se mantiene el nivel a lo largo de sus seis temas y sólo la tercera canción es un poco distinta al resto por no ser sinfónica e incluir un extraño solo de guitarra. Me parece raro que este disco no goce de mayor reconocimiento que el que he visto en los círculos del underground, porque es un buen álbum y tiene un mínimo de personalidad, ahora tú decides.

lunes, 2 de marzo de 2009

MYSTICAL FULLMOON - Beyond Somber Passages


Desde tierras italianas (Milán, al igual que Lustnotes) nos llegó este álbum de 1998 tras una demo del mismo año en la que aparecían cuatro de los seis temas de este CD, año en que también debutaron Maldoror con su "Ars Magika", y no sólo coinciden en el año y el país porque ambos discos fueron editados por Alkaid Records, sello que también lanzó el "The vampire chronicles" de Theatres des Vampires (que no me acabó de convencer, por cierto), y los tres discos fueron editados en muy bien presentado formato digipack.

Pero la música de este breve álbum (de 25 minutos) no se parece a ninguno de esos dos grupos, es más sombrío y personalmente me recuerda mucho al "Memoriam Draconis" de los belgas Avatar, disco que se caracterizaba por tener un trabajo de teclados con mucha influencia del "In the nightside eclipse" de Emperor, aunque con un sonido de guitarras y batería menos salvaje.
Esas características son por tanto aplicables a este "Beyond somber passages" con sus teclados de corte atmosférico más que dominante, con ese sonido ambiental que nos envuelve en la herrumbre del tiempo y las sombras de lo antaño olvidado, aunque en situaciones puntuales toman un papel más prominente e incluso aparecen fugaces pianos y órganos, por no hablar de las canciones en las que el teclado aparece en todo momento.
La producción, como se habrá podido suponer con semejantes comparaciones, es modesta (y floja) y hace que no suene cafre precisamente, pero las guitarras y baterías suenan desde luego a Black Metal, aunque con un pequeño margen para riffs más melódicos que consiguen hacer algo más atractivo el conjunto. Y el bajo se nota bastante a pesar de la producción, ojo.

La voz es algo que me gustaría que se hubiese pulido un poco, porque es una rasgada que es igual a lo largo de todo el disco, una voz algo forzada y me hubiese gustado un tono más macabro, pero tampoco me puedo quejar porque al menos no es una voz horrible como en otros casos.

Ya tengo una copia encargada y pronto comprobaré si el artwork del digipack es tan bueno como esta portada que muestra parte de la pintura "Hécate" de William Blake, y ya ha pasado este álbum a engrosar las filas de mi arsenal italiano junto a Maldoror, Lustnotes, Opera IX, Art Inferno y compañía. Recomendado si a ti también te gustan estos sonidos noventeros que difícilmente se oyen en trabajos más actuales.