lunes, 26 de junio de 2023

TENEBRAE OBORIUNTUR - Waiting for Satan's Rising

 



Me encontraba últimamente considerando muy seriamente hacer la reseña del álbum "Fallax" de esta banda italiana, único disco completo que tienen en su breve discografía pese a que llevan activos desde los años 90. Hablando de esos años, me parecía que el mentado disco sonaba a Black Sinfónico muy noventero pese a su reciente fecha de lanzamiento (2019 en vinilo y 2021 en CD), pero vi que fue realmente grabado en 1998 y se confirmó que no era solamente una impresión.

Actualmente tocan un Black Metal más crudo y seco sin teclados, como pude comprobar con el tema de adelanto de su nuevo disco que saldrá en julio, pero mirando atrás vi que tienen un EP de 1996 que ha resultado más sinfónico noventero incluso que el mencionado "Fallax". Es un material tan genuino de la temática general del blog que debe ser el escogido para la reseña.

Con solamente tres temas y una extensión total por debajo de la media hora, el despliegue de Black Sinfónico de mediados de los 90 no puede ser más auténtico. Empezando por la modesta producción que hace sonar turbio el amasijo de distorsionadas guitarras con baterías cacharreras que igual tocan rápidamente o se relajan en pasajes más calmados para favorecer las ambientaciones.
La voz rasgada es casi chirriante y muy agresiva, como un reptil defendiéndose con desesperación al ser acorralado en su refugio. A diferencia del disco debut, el vocalista también emplea voces guturales y alguna narración susurrada. Aunque no la vea aparecer como invitada, a veces una vocalista femenina aporta recitaciones lóbregas en las partes más atmosféricas que casan estupendamente con los teclados.
Precisamente el teclista es el mismo que desgarra las voces blackers. Si en el disco debut emplea un sonido casi orquestal, aquí en el EP apostó más por los teclados brumosos, abundancia de los pianos tan clásicos del Black Sinfónico y algún detalle como un leve órgano en el primer tema, además de los típicos efectos de sonido de viento y demás parafernalia que tanto gusta a los grupos de este estilo.

Se hace corto que una música de semejantes características sea un breve EP, pero esto concede sucia satisfacción a quienes gusten de Aevlord, Avatar y similares.






sábado, 24 de junio de 2023

TILL - Oyer and Terminer

 


Para hoy el menú es infecto y sucio con un buen disco de Black Metal lleno de zumbidos y el crujir de la herrumbre por parte de este dúo estadounidense que nos brindó este su segundo disco de 2021 que se nota que es un disco pasado por el tamiz de la escena actual pero, sin duda, bebe de las fuentes tradicionales con todas y cada una de las características del género.

El tema de los juicios por supuesta brujería de Salem no es ninguna novedad en el estilo, ya tenemos por ejemplo aquel gran disco de Ceremonial Castings basado en ello, aunque no nos vamos a quejar a estas alturas si otro grupo blacker más se une a todos los que componen sobre aquel infame tribunal.

Pasando a lo que nos interesa, el sonido, tenemos una buena dosis de Black Metal con guitarras infectadas de mugrosa distorsión y una voz rasgada igualmente lacerada por la podredumbre, ingredientes que siempre me hacen esgrimir una torcida sonrisa de satisfacción. Juegan, no obstante, con los ritmos evitando la monotonía y la batería cacharrera tiene cierta variedad así como se agregan voces tipo cántico para dar una atmósfera más miserable.
Hablando de atmósfera, hacen un uso medido pero acertado de los teclados, que realzan las partes más ambientales y hasta llegan a cobrar un trágico protagonismo con pianos como el de la intro o el deprimente final del tema "From My Cell I Curse the Commonwealth".
Tiene, como dije al empezar un evidente aire de grupo de hoy día, no se podría hacer pasar por noventero como digo muchas veces con otros grupos, aunque no deja de tener la sonoridad puerca y disonante del Black Metal y esa combinación de sucia oscuridad con atmósfera siempre gana puntos para mi gusto.

No estoy bien al corriente con su discografía, pese a que son sólo tres álbumes, pero sí que puedo decir que este disco me parece recomendable.







miércoles, 21 de junio de 2023

THE KRYPTIK - A Journey to the darkest Kingdom

 



Conocí al dúo brasileño The Kryptik con el EP que lanzaron en 2020, "Behold Fortress Inferno", buena toma de contacto con su Black Sinfónico que me causó una buena impresión inicial de tal manera que consideré hacerle la reseña en el blog. 
No me acordé al final de escribir sobre ellos, pero resulta que este año ha salido a la luz (de la luna) un nuevo álbum que esta vez sí que se llevará su reseña.

Anteriormente conocidos como Cryptic Lorn, nombre que personalmente me gusta más y hubiera preferido que conservaran, tocaban un Black Metal crudo que convirtieron en sinfónico con el cambio de nombre, como cuando un reptil o un artrópodo muda su piel al crecer.
Me he acordado mucho de Vargrav al encontrar tan mágica y nostálgica portada que, al igual que en el caso del grupo finlandés, presenta un disco de Black Sinfónico de los 90 que tiene posos de Emperor y Odium por citar dos ejemplos evidentes.

Intensidad sería mi elección si tuviera que escoger definir el disco con una sola palabra, en sus largas canciones que rozan los diez minutos (o directamente los sobrepasan) hay un estilo bastante uniforme y lineal que hace que todo el conjunto suene homogéneo, como si estas canciones fueran fragmentos de un único y extenso tema, con una fuerza que prácticamente no decae. Tiene sus partes lentas y hasta interludios de puro teclado ambiental que se agradecen mucho para mi gusto, pero lo que domina el disco es la potencia de baterías rápidas con guitarras compactas y densas que son atravesadas por la voz rasgada de tono casi aullante.
Es en las voces donde encuentro el único punto negativo al usar en ocasiones unas declamaciones que no me acaban de convencer. Los teclados, en cambio, son para mí lo mejor al tener toda esa aura noventera de palacios de cristal en los confines más olvidados, esa gélida mano con su toque heredado de Emperor a la manera de Odium, llegando a apreciarse hasta un aire de melancolía en medio de su torva atmósfera.

Estas llamaradas azules en la oscuridad sin duda van a deleitar a los seguidores de siempre del estilo.






martes, 20 de junio de 2023

APOSTASY - Mournful Heaven

 


Apostasy es un nombre engañoso porque hay un buen puñado de bandas existentes así llamadas, hasta dieciocho según veo en Metal-Archives, entre las que está una banda sueca de Black Sinfónico con un estilo muy propio de la etapa media de Dimmu Borgir que bien merecería salir reseñada en el blog.
Pero ahora estamos con estos otros Apostasy, grupo noruego de finales de los años 90 que tocaba lo que podríamos definir como Black Sinfónico embuido de Gothic Metal a la manera de Dismal Euphony o Darzamat.

Su escueta discografía, compuesta únicamente por tres trabajos en formato EP, comenzó con éste de 1998 que no alcanza la media hora de duración y contiene, no obstante, buen material noventero del que nos gusta a los amantes del estilo.
Tras la intro, con un sonido que diría celestial, comienza la primera de las cuatro canciones reales del EP y desde el principio muestran lo dicho al inicio de la reseña, ese estilo que podemos considerar Black/Gothic al tener elementos comunes de ambos estilos. 

La base parte del Black Sinfónico y melódico al tener las guitarras mínimas reminiscencias del crujir de ese clásico estilo nórdico y unas voces rasgadas con buena cantidad de mugre reptiliana. Sin embargo, la voz femenina cobra un papel muy importante, incluso protagonista según el momento de la canción, muy bien acompañada por el aire etéreo y vaporoso de los teclados noventeros que se lucen en los fragmentos de mayor calma, ya que en los momentos agresivos los dejan más apartados. Hay alguna que otra voz narrada, tanto femenina como masculina, siendo en este último caso de ese tipo de susurros que tanto gustan a los grupos del tipo Cradle of Filth.
Tiene cierto regusto, en mi opinión, a los grupos de Death Melódico que se acercan a las sonoridades del Black Melódico, aunque lo predominante es ese híbrido con el Gothic Metal que a veces llega hasta a sonar folkie.

El diseño corrió a cargo de Paul Kuhr, quienes los doomsters sabrán de sobra que es quien anda tras la banda November's Doom, y ciertamente quedó mejor que los otros dos trabajos de la banda con sus horrendas portadas.
Poco hay más que decir si sabes que te gusta el estilo.