
Con este debut de 2000 pasa más o menos al revés, que parece Gothic Metal con influencia del Black Sinfónico. Se lo suele considerar como Doom-Gothic incluso, pero sin olvidarnos de los toques blackers, principalmente en los momentos más rápidos (pocos en un disco bastante lento y atmosférico) y la voz raspada.
Me gustaría recordar que algunos de sus miembros militaron en el ya difunto grupo Epic, un Black Sinfónico con aires de literatura de caballerías, pero en Love Lies Bleeding se suprimen esas pinceladas medievales en pos de un ambiente más romántico y poético, lo que se traduce en ingentes cantidades de coros y teclados.
Porque resulta que entre sus influencias musicales cuentan, además de otras bandas de Metal, con grandes compositores como Brahms, notándose especialmente en esos preciosos pianos que dotan a este disco de una atmósfera distinta a la de los grupos escandinavos, junto con los clavicordios, simulaciones de oboe y flauta, órganos y demás tipos de teclados que nos brinda su teclista y compositor Adrastis Korgan.
Es un disco especialmente lento como decía, con canciones cortas en cantidad pero muy largas en duración, pues la duración media de sus cuatro canciones ronda entre los diez y quince minutos, a lo que sumamos una outro muy similar para mí a la intro del álbum de Epic.
Sólo a veces aceleran lo suficiente como para pensar en Black Metal, estilo recordado con más frecuencia por la voz rasgada (no chillona) que tiene un gran acompañamiento de coro femenino, ese tipo de voz femenina que encontrábamos en el “Delictum” de Siebenbürgen.
Con el tiempo me ha gustado cada vez más esta faceta tan lírica de una banda que para su segundo disco “S.I.N.” se tornó más rápida y agresiva, pero igualmente sinfónica y decadente a la francesa. Recomendado para amantes de cosas tan aparentemente dispares como Epic, Tristania, Fallen Sentinel, Siebenbürgen, Vampiria o los primeros Ancient Ceremony.