viernes, 15 de enero de 2010

HORTUS ANIMAE - The Melting Idols


Muchos de vosotros conoceréis a esta banda italiana por su Black Metal tan extraño y experimental, tal vez de mano de su “Waltzing Mephisto” de 2003 como fue mi propio caso hace mucho tiempo, o incluso con el peculiar “The blow of furious winds” editado dos años después. Es ese grupo ya disuelto que incluía al batería de Ancient y perpetró una particular versión de “Freezing Moon” de Mayhem.

Pues olvidad todo eso en cuanto empiece a describir este disco, porque no tiene nada que ver. Toda esa extravagancia está aquí ausente como si de una banda diferente se tratase, y personalmente estoy muy satisfecho porque esas excentricidades suyas nunca me cuajaron (cuestión de gusto personal).

Pero pasemos a comentar este debut del 2000 dejando ya a un lado esos datos biográficos. Su portada tiene esa estética de hace varios años atrás a su fecha de lanzamiento, este dibujo en blanco y negro parece propio de una demo editada en formato cassette , y ambos parecidos tienen mucho que ver en el sonido del álbum.
Hablando ya más claro, es un CD autoproducido con una sucia producción al nivel de una demo (como pasaba con el proyecto sueco Parnassus), y eso unido al tipo de teclados hace de este trabajo algo muy noventero con tintes más recientes. Comienza el disco sonando ya a cascado, como la demo de algún viejo grupo de Black Sinfónico, con la señorial presencia de órganos religiosos, pianos y efectos de campanas, incrementando la sensación de estar oyendo un grupo a la vieja usanza cuando entra en escena la distinguida aridez vocal de varios tipos: raspadas, susurros, guturales y gritos desgarrados.
Los toques más actuales se perciben en las guitarras, que están anegadas en esa producción de agua estancada con espumas verdosas, pero liberan unas melodías y solos que revelan su inquietud por ir algo más allá del podrido corsé del Black Metal.

Mucho me temo que no gustará a los oyentes más exigentes en cuanto a producciones, porque ya os aseguro que es la representación sonora de uno de esos repulsivos animales que parecen un espécimen disecado más que algo vivo, pero esos teclados y el encanto añejo pueden agradar en cambio a fans de Black Palace Symphony, Enochian Key, primer disco de Bishop of Hexen, AevLord, Capitollium o el último disco de Finnugor.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

hola gracias por fin hortus animae haber pones mas de esa banda atte pablo

Carlos dijo...

Los otros dos discos:

http://www.mediafire.com/?nn2fitamyni

http://www.megaupload.com/?d=4L6NIPFC