Menudos recuerdos tan buenos me ha traído el reencuentro con este EP de 2005, que conocí tres años después de su lanzamiento en plena búsqueda de Black Sinfónico al estilo de Capitollium o Aevlord, comparaciones que hago a sabiendas de lo que desgranaré en la reseña.
Estos italianos no tuvieron mucho tiempo para mostrar su potencial porque solamente se quedaron en este breve EP que en sus cinco temas incluye tres pertenecientes a su primera demo.
Su estilo ese Black Sinfónico recién heredado de los 90 que derivó en sonidos entre medievales y litúrgicos como el de los dos grupos mencionados, con el velo de turbidez que confiere una baja y modesta producción que hace que por ejemplo la batería quede un poco distante y apagada en el conjunto.
Esta atmósfera, naturalmente, emana de los teclados que frecuentemente toman la forma de órganos o clavicordios para el regocijo de quienes tenemos estos gustos, cosa que hubiera sido sensacional si en vez de un corto EP esto fuera un disco debut completo.
El CD comienza de manera bastante frenética con ritmos rápidos y voces salvajes en el marco de los citados órganos, aunque más adelante se comprueba que los temas se desenvuelven bien en los más abundantes medios tiempos que no olvidan esos momentos más agresivos y veloces. Las guitarras son las propias de un disco humilde y enfocado en las ambientaciones, sonando sencillas pero con margen para la melodía al igual que no se deja de lado que suenan mínimamente blackers tratándose de este estilo. La voz rasgada es bien furiosa escupiendo las letras y tiene cierta variedad al introducir otras casi guturales y hasta cánticos de voz clara.
Hay que ser muy seguidor de esta música para disfrutar de este EP, a quien no le llame la atención el Black Sinfónico le parecerá que no aportada nada, pero para los fans empedernidos será otro cantar.
2 comentarios:
Muchas gracias por tus recomendaciones en este maravilloso blog. Lo sigo desde hace mucho tiempo, he descubierto varios grupos interesantes gracias a él (por ejemplo, Al-Namrood) y creo que nunca me había dignado a dejar un comentario. Lo dicho, ¡gracias!
Gracias a ti, precisamente uno de los motivos por los que he vuelto a utilizar el blog en estos años recientes es saber que aún hay quien lo lee después de tanto tiempo.
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