Ya que el otro día reseñé a Melancolia como Dark Metal, ahora he recordado otro grupo así etiquetado que además cité al escribir sobre Atanatos por ser editados por el mismo sello y tener en común ser entretenidos y agradables sin ser joyas impresionantes.
Otro grupo que tengo que mencionar inevitablemente es Midnattsol, esa banda de Gothic que cuenta con la hermana de Liv Kristine como vocalista, ya que todos sus miembros ahora forman parte de sus filas, además de (por supuesto) los dos músicos de Midnattsol que formaron Ahab (Funeral Doom aquí reseñado en este blog).
Ahora centrándonos de la música de esta banda alemana, de momento sólo conozco este debut de 1999, que presenta ese llamado Dark Metal que yo interpreto en este caso como una mezcla de Black Melódico y Gothic Metal, de manera tan homogénea que realmente no podría categorizarlos en uno solo de esos estilos.
Y esto se traduce en un disco muy relajado sin ritmos rápidos, muy ambiental para dar rienda suelta a su lado más gótico, pero con guitarras que dejan percibir cierta distorsión blacker pese lo discretas y ligeras que quedan por culpa de la producción. Lo primero que destaca es el variado estilo vocal, que tiene como voz más frecuente una estupenda rasgada al estilo Black que recuerda a las de Eblis y Judas Iscariot, por ser el mismo tipo de voz ronca y áspera, junto con guturales, voces limpias masculinas muy líricas y una soprano, además de susurros y murmullos.
Otro aspecto destacable, para mí al menos como amante de estas cosas, son los teclados, que más que al Gothic recuerdan al Black Sinfónico, pues tienen un sonido bastante lúgubre por momentos que me parecen muy a la manera de esos grupos con atmósferas nocturnamente seductoras. Se pueden citar por ejemplo los pianos, los pocos pero estupendos órganos o efectos como campanas.
Pero no todo va a ser así de positivo para mí, porque a cambio de esos momentos brillantes tengo que escuchar otros tantos que rompen con el equilibrio de las canciones, que adolecen de cierta falta de cohesión en su estructura. Deberían haber tenido en cuenta esquemas más sólidos a la hora de componer los temas, porque cojean no pocas veces y uno se distrae así.
Por lo demás, no deja de ser un buen disco para escuchar tranquilamente por las noches, y dejarse seducir por las voces líricas, los siniestros teclados y las voces horrendas, puede gustarte de disfrutas mucho de cosas en plan Vampiria, Azmodan o primeros Ancient Ceremony.
Otro grupo que tengo que mencionar inevitablemente es Midnattsol, esa banda de Gothic que cuenta con la hermana de Liv Kristine como vocalista, ya que todos sus miembros ahora forman parte de sus filas, además de (por supuesto) los dos músicos de Midnattsol que formaron Ahab (Funeral Doom aquí reseñado en este blog).
Ahora centrándonos de la música de esta banda alemana, de momento sólo conozco este debut de 1999, que presenta ese llamado Dark Metal que yo interpreto en este caso como una mezcla de Black Melódico y Gothic Metal, de manera tan homogénea que realmente no podría categorizarlos en uno solo de esos estilos.
Y esto se traduce en un disco muy relajado sin ritmos rápidos, muy ambiental para dar rienda suelta a su lado más gótico, pero con guitarras que dejan percibir cierta distorsión blacker pese lo discretas y ligeras que quedan por culpa de la producción. Lo primero que destaca es el variado estilo vocal, que tiene como voz más frecuente una estupenda rasgada al estilo Black que recuerda a las de Eblis y Judas Iscariot, por ser el mismo tipo de voz ronca y áspera, junto con guturales, voces limpias masculinas muy líricas y una soprano, además de susurros y murmullos.
Otro aspecto destacable, para mí al menos como amante de estas cosas, son los teclados, que más que al Gothic recuerdan al Black Sinfónico, pues tienen un sonido bastante lúgubre por momentos que me parecen muy a la manera de esos grupos con atmósferas nocturnamente seductoras. Se pueden citar por ejemplo los pianos, los pocos pero estupendos órganos o efectos como campanas.
Pero no todo va a ser así de positivo para mí, porque a cambio de esos momentos brillantes tengo que escuchar otros tantos que rompen con el equilibrio de las canciones, que adolecen de cierta falta de cohesión en su estructura. Deberían haber tenido en cuenta esquemas más sólidos a la hora de componer los temas, porque cojean no pocas veces y uno se distrae así.
Por lo demás, no deja de ser un buen disco para escuchar tranquilamente por las noches, y dejarse seducir por las voces líricas, los siniestros teclados y las voces horrendas, puede gustarte de disfrutas mucho de cosas en plan Vampiria, Azmodan o primeros Ancient Ceremony.
1 comentario:
hey..el enlace no sirve...de antemano gracias por solucionarlo
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