Recordando discos pendientes de retomar y escuchar con mayor análisis, ahora mismo estoy disfrutando del segundo disco de 2001 que me recomendaron de estos eslovacos, que llegaron a sacar su último disco con un sello español.
Siendo uno de esos casos en los que la portada es fiel indicador de la música contenida, ese fulgor solar con moribundo destino refleja que tenemos entre manos un disco de Black Sinfónico deudor del fabuloso legado de Limbonic Art, aunque con pinceladas propias como ahora veremos.
El tema que abre el disco sí que es un trallazo de Black Sinfónico con todos esos rasgos que lo podrían encuadrar en los 90: batería programada rápida, guitarrazos densos y monótonos, voces agrias y algún toque de voz femenina como coro. Pasado el tema inicial, esas características las vamos a seguir encontrando, pero junto a otras ciertamente ausentes en Limbonic Art; más variedad de ritmos, lucimiento guitarrero, variaciones en la voz (no sólo al incluir unas pocas narraciones en off y guturales) y mayor concesión a la voz femenina.
Es curioso que en un grupo así se presten a juegos vocales, cuando lo normal sería oír todo el rato el mismo desgarro vocal, pero como dije, los gruñidos ferales se combinan con una vocalista que para mi gusto hubiera preferido que sonara más etérea (como sí llega a sonar en el tema "Death Scholar").
En cuanto a teclados, no tienen tantísima pompa como el grupo referido o el debut de Obsidian Gate por ejemplo, pero tienen sus momentos de sinfonismo astral y no pocas veces aparecen pianos subrayando la melodía global.
Exceptuando los pequeños inconvenientes que encuentro personalmente (que la voz femenina fuera más mágica y los breves momentos electrónicos), es un disco más que digno, y acabaré diciendo que más que Limbonic Art, es como si hibridamos a los viejos Ewigkeit con Ethereal Pandemonium y ahí tenemos un producto cósmico más para nuestro repertorio.
Siendo uno de esos casos en los que la portada es fiel indicador de la música contenida, ese fulgor solar con moribundo destino refleja que tenemos entre manos un disco de Black Sinfónico deudor del fabuloso legado de Limbonic Art, aunque con pinceladas propias como ahora veremos.
El tema que abre el disco sí que es un trallazo de Black Sinfónico con todos esos rasgos que lo podrían encuadrar en los 90: batería programada rápida, guitarrazos densos y monótonos, voces agrias y algún toque de voz femenina como coro. Pasado el tema inicial, esas características las vamos a seguir encontrando, pero junto a otras ciertamente ausentes en Limbonic Art; más variedad de ritmos, lucimiento guitarrero, variaciones en la voz (no sólo al incluir unas pocas narraciones en off y guturales) y mayor concesión a la voz femenina.
Es curioso que en un grupo así se presten a juegos vocales, cuando lo normal sería oír todo el rato el mismo desgarro vocal, pero como dije, los gruñidos ferales se combinan con una vocalista que para mi gusto hubiera preferido que sonara más etérea (como sí llega a sonar en el tema "Death Scholar").
En cuanto a teclados, no tienen tantísima pompa como el grupo referido o el debut de Obsidian Gate por ejemplo, pero tienen sus momentos de sinfonismo astral y no pocas veces aparecen pianos subrayando la melodía global.
Exceptuando los pequeños inconvenientes que encuentro personalmente (que la voz femenina fuera más mágica y los breves momentos electrónicos), es un disco más que digno, y acabaré diciendo que más que Limbonic Art, es como si hibridamos a los viejos Ewigkeit con Ethereal Pandemonium y ahí tenemos un producto cósmico más para nuestro repertorio.
2 comentarios:
gracias amigo , no los conocia
Que buena portada xD
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