Pues era inevitable reseñar el otro disco de los franceses AevLord, banda que me ha entusiasmado porque hacía mucho tiempo que no disfrutaba de un Black Sinfónico de primera como el que os presenté en la entrada de su “History of a new mankind” de 2007.
Este debut de 2004 fue autoproducido y ciertamente tiene una presentación más discreta, aunque también hay que decir que la oscura portada es mucho más interesante que el castillo hecho con ordenador de su otro disco, y la contraportada tiene una foto en blanco y negro de árboles igual de gratificante.
Dura unos treinta y dos minutos repartidos en once canciones (bueno, dos son la intro y la outro), lo que nos da una media de apenas tres minutos como más o menos pasaba con su sucesor, siendo la excepción “The black castle” con sus seis minutos.
Entrando ya en materia, lo que nos ofrece este primer disco es algo no muy alejado de lo que conocemos de su otro trabajo, ese Black Sinfónico con tétricos teclados y voces variadas como espectros de gasa entre el humo del tiempo y la mente, pero con diferencias basadas sobre todo en que el nivel es el típico de un debut o una demo.
Para su segundo trabajo se contó con el buen hacer de un guitarra y un batería, pero aquí estamos ante el clásico proyecto en solitario tan frecuente en el Black y el Doom, con lo que las guitarras son más austeras y discretas, siendo no pocos los momentos en que ni suenan y dejan las canciones en manos de los teclados.
Y, hablando de los teclados, aquí son especialmente oscuros y medievales en comparación con su segundo disco, predominando en casi todos los temas esos órganos que nos transportan al siglo XII, con sus mazmorras, intrigas, brujería y temas de caballería en general. Aunque en una de las canciones finales tenemos ese estupendo piano que tanto me gusta.
El húmedo rasgar en la carne de la voz es más podrido que nunca, y en algunos temas colaboró una tal Emilia con magnífico resultado, sobre todo en la canción “Alexia Ashford” con ese interesante dueto con la voz clara masculina y su parte solista (por cierto, es una de las mejores canciones del disco).
La atmósfera en general es al estilo de los primeros Hecate Enthroned, Maleficentia, Capitollium, Forsth y demás grupos similares con ambiente fantasmagórico o del Medievo, por lo que sus fans deben estar atentos; pero tiene el inconveniente de tener esas guitarras tan secundarias y puede no gustar a los mismos que no son capaces de disfrutar de cosas como el primer disco de Bishop of Hexen, Izakaron o Fear of Eternity. Aquí os dejo en todo caso con el otro disco de una banda que me ha conquistado.
Este debut de 2004 fue autoproducido y ciertamente tiene una presentación más discreta, aunque también hay que decir que la oscura portada es mucho más interesante que el castillo hecho con ordenador de su otro disco, y la contraportada tiene una foto en blanco y negro de árboles igual de gratificante.
Dura unos treinta y dos minutos repartidos en once canciones (bueno, dos son la intro y la outro), lo que nos da una media de apenas tres minutos como más o menos pasaba con su sucesor, siendo la excepción “The black castle” con sus seis minutos.
Entrando ya en materia, lo que nos ofrece este primer disco es algo no muy alejado de lo que conocemos de su otro trabajo, ese Black Sinfónico con tétricos teclados y voces variadas como espectros de gasa entre el humo del tiempo y la mente, pero con diferencias basadas sobre todo en que el nivel es el típico de un debut o una demo.
Para su segundo trabajo se contó con el buen hacer de un guitarra y un batería, pero aquí estamos ante el clásico proyecto en solitario tan frecuente en el Black y el Doom, con lo que las guitarras son más austeras y discretas, siendo no pocos los momentos en que ni suenan y dejan las canciones en manos de los teclados.
Y, hablando de los teclados, aquí son especialmente oscuros y medievales en comparación con su segundo disco, predominando en casi todos los temas esos órganos que nos transportan al siglo XII, con sus mazmorras, intrigas, brujería y temas de caballería en general. Aunque en una de las canciones finales tenemos ese estupendo piano que tanto me gusta.
El húmedo rasgar en la carne de la voz es más podrido que nunca, y en algunos temas colaboró una tal Emilia con magnífico resultado, sobre todo en la canción “Alexia Ashford” con ese interesante dueto con la voz clara masculina y su parte solista (por cierto, es una de las mejores canciones del disco).
La atmósfera en general es al estilo de los primeros Hecate Enthroned, Maleficentia, Capitollium, Forsth y demás grupos similares con ambiente fantasmagórico o del Medievo, por lo que sus fans deben estar atentos; pero tiene el inconveniente de tener esas guitarras tan secundarias y puede no gustar a los mismos que no son capaces de disfrutar de cosas como el primer disco de Bishop of Hexen, Izakaron o Fear of Eternity. Aquí os dejo en todo caso con el otro disco de una banda que me ha conquistado.
11 comentarios:
hey como van todos ... me pregunto si el link si funciona porque parece que no... excelente banda!!!
Lo acabo de probar y parece que sí funciona, pero de todas formas tengo pensado subirlo a megaupload o mediafire este fin de semana.
ahh que bien... lo probe mas tarde y si funciono h he heee!!! hey excelente banda ... ademas te recomiendo unas q no se si te gusten xq no las he visto en tu blog pero igual son buenas...crystal abyss, wykked wytch, aphangak... todas de metal synfonico o con teclados siendo la primera muy sinfonica espero los escuhes y te gusten... la segunda es de miami y la tercera aphangak es de medellin, colombia... saludos
A los dos primeros los conozco, pero me bajaré a esos Aphangak ;)
te recomiendo el hidden echoes de aphangak me parece bueno saludos great blog!!!
hola me parecia mejor comentar aca q en u respectivo lugar porq nunca lo ibas a leer..asi q lo vuelvo a decir..no tiene nada q ver con est
mabool es un DISCASO.asi q no hables al pedo y lo despotriques
...si vampiria esta bueno..hay muchas bandas asi en arg deberias buscar mas
..y el ultimo disco es mas rapido y brutal.ya q among no t parecio eso
¿Pero quién despotrica? He dado una opinión personal, lee bien. Y aun así sólo dije que me gustaría que sonasen más Death, ¿eso es despotricar y "hablar al pedo"? Me temo que no.
Vampiria me encantan en el "Among mortals" precisamente por el ritmo sin prisas que tiene, ¿cuándo he dicho que me pareciese mal?; de Argentina conocí hace poco a Saevus Somnia y me gustaron, además de a Dunkelstorm también, buenos grupos, no como Ecliptic Sunset o Carnarium que no me gustaron tanto. Dije que Vampiria fue el primer grupo, no el único.
creo q no sirve el link,o checare mas tarde pero me kede con las ganas T-T te recomiendo a una banda italiana q se llama Evol tal vez ya los conoscas pero digo porq no he visto de evol aqui en el blog,me he vuelto seguidor de tus aportes,he conocido bandas muy buenas,solo q habeses me cuesta conseguirlos originales,y un poco mas aqui en mexico :S por cierto tambien te recomiendo a Storm tocan viking folk metal,no recuerdo bein a los integrantes pero al parecer ahi participa satyr de satyricon,muy buen proyecto,bueno me retiro,saludos y buen blog
Ya he cambiado el link, sin problemas ya ;)
A EVOL los conozco, pero nunca profundicé mucho. Saludos y espero que el blog te pueda seguir siendo de utilidad.
Alexia Ahsford es justamente la misma canción llamada Berceuse del juego Resident Evil Code Verónica. Es exactamente la misma canción pero con parte añadidas, pero sin duda la mejor del álbum.
Gracias por tu aportación, hace unos años quise buscar quién es Alexia Ashford (pensando ingenuamente que sería algún personaje real) y vi que era parte de esa saga de videojuegos, pero desconocía totalmente que la intro de la canción también perteneciera al Resident Evil.
Un saludo, y nuevamente gracias por el dato.
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