sábado, 9 de junio de 2012

LUNAR AURORA - Hoagascht




Tras haber dedicado todo el mes anterior a hacer reseñas de discos nuevos, algo nunca visto en el blog, voy a seguir un poco más, aunque no será la tónica general y volveré a ir poniendo discos algo más viejos o del año pasado.
Ahora es el turno del regreso de un grupo alemán de larga trayectoria iniciada en los 90, que vuelve sin repetirse ni sin fracasar estrepitosamente al variar su fórmula con los años, cosa realmente difícil.

Analicé hace tiempo el que es mi disco favorito del grupo, "Weltenganger" de 1996, donde por entonces hibridaban lo aprendido con Satyricon y Emperor con ese toque de bandas como Sear Bliss. Ahora la cosa ha ido cambiando, llevan un buen puñado de discos donde desarrollaron un estilo algo más moderno pero sin alejarse de los patrones del Black Metal.

Pero pasemos al contenido de este disco. Con una intro desacertada que no encaja con lo que después llegará, empieza el primer tema marcando un disco de ritmos lentos y atmósferas de anocheceres entre la espesura de las coníferas.
Cuando dije que no se alejan aún del Black Metal tradicional, se nota en que las guitarras siempre tienen ese zumbido tan boscoso y propio. Las baterías se nota que son grabadas, pero no suenan demasiado chatarreras y los ritmos escogidamente lentos (no siempre, ojo) hacen que esto sea a veces un poco como lo último de los invernales Forest Silence.
La voz va muy a tono con todo esto, siendo una rasgada muy áspera y hosca, sin estridencias ni gritos. Lo que acaba de rematar el conjunto son los teclados, si bien nunca fueron realmente muy sinfónicos ahora tampoco lo son, dejándolos para el papel eminentemente ambiental.
Por un lado los sintetizadores me me parecen muy acertados, cuando soplan esas brumas heredadas del debut de Emperor, o las simulaciones épicas de trompeta, pero por otra parte me chirrían los sonidos modernos tan fuera de lugar; hay que tener cuidado con esas cosas, porque demasiados ambientes extraños y cargantes pueden estropear las canciones. Por suerte no ha llegado a ser el caso porque no han abusado de peligrosas rarezas.

Si le añadimos efectos como el sonido del reloj de péndulo, o el ulular del cárabo común en la intro del segundo tema, se remata el efecto nocturno representado en la portada con otra ave estrigiforme: la lechuza común. Así debió ser el inicio del disco en vez de los sonidos raros.
Si te gusta lo anterior del grupo, esto es éxito asegurado, y si no, queda muy recomendado.


3 comentarios:

bartholomeuznight dijo...

los links de los discos ya no se publican en el blog?

Carlos dijo...

Preferí dejar de poner enlaces al ver cómo está el tema de la piratería actualmente...

Anónimo dijo...

Oye amigo, visito tu blog muy seguido, he estado buscando sobre una banda, pero nada, espero sepa algo, se llama Birjer! le agredesco cualquier informacion.